Hablaba y hablaba...
Hablaba, y hablaba, y hablaba, y hablaba, y hablaba, y hablaba, y hablaba. Y venga hablar. Yo soy una mujer de mi casa. Pero aquella criada gorda no hacía más que hablar, y hablar, y hablar. Estuviera yo donde estuviera, venía y empezaba a hablar. Hablaba de todo y de cualquier cosa, lo mismo le daba. ¿Despedirla por eso? Hubiera tenido que pagarle sus tres meses. Además hubiese sido muy capaz de echarme mal de ojo. Hasta en el baño: que si esto, que si aquello, que si lo de más allá. Le metí la toalla en la boca para que se callara. No murió de eso, sino de no hablar: se le reventaron las palabras por dentro.
FIN
Max Aub
Comentarios
Ojala siempre tuviera una toalla a mano.
pd: A sonado a psicópata?
ppd: Es lo que intentaba.xD
Entonces la gente dejó de mirarme.
Un voto a favor de las marus!!
PD: Hablo más que escribo. Hablo mucho. Pero como decía Ana y el Rey,
"Cuando una mujer que tiene mucho que decir se calla, su silencio ensordece"
Draz.